Seguro que a todas las personas a las que les gusta hacer ganchillo, les encanta el trapillo, y es que es un lujo el poder terminar las cosas rápido, además del acabado tan bonito.
Esta es mi alfombra de trapillo para mi habitación-estudio. Al final me pareció un poco pequeña, así que estoy pensando en agrandarla un poco, pero parece que los perros le han cogido cierto cariño y ahora no quieren estar más que tumbados sobre ella, y si no, mirad a Kurt qué cómodo.
Y desde aquí os animo a que probéis con el trapillo porque además de dar mucho de sí, cunde mucho, por ejemplo, esta alfombra la hice en un par de ratos y es tan sencillo como hacer un posavasos de ganchillo pero en tamaño XXL.
Hasta pronto!
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